martes, 2 de junio de 2015

OLA FLORIDA DE HOKUSAI

Mientras estaba pintando la puerta del restaurante japonés Su@Si dentro del festival C.A.L.L.E en Lavapiés vi la Ola de Hokusai pintada en el paño liso blanco que no tiene acabado de ladrillos dentro del restaurante, y simulaba un lienzo en blanco, y la vi llena de flores.
Ahora la podéis ver todos porque ya está pintada.


Me siento muy afortunada de haber podido llevar a cabo este proyecto con, de nuevo, total libertad ¡Gracias Javier!,
y también agradecida por el apoyo económico. (Javier es el propietario del local y presidente de la asociación de comerciantes de Lavapiés)

El llenar la ola de flores guarda cierta relación con la intervención en la puerta (despertar emociones positivas y mostrar un elemento natural representativo de todos los continentes) pero, sobre todo, con MIRAR hacia la naturaleza y lo que está por venir con otros ojos.

Si pienso en Japón me viene a la mente esta ola. Es una imagen cargada de belleza pero al mismo tiempo es "monstruosa". La ola es gigante y entres sus fauces tres barcas con marineros están a punto de ser devoradas.

El mar se muestra sublime pero al mismo tiempo amenazador.
Me parece un grito de la naturaleza para ser atendida, Hokusai la mostró con gran belleza pero la ira del mar es lo que se ha capturado en un instante.
¡Hace cuántos años!, ya un par de siglos de esta imagen, y sigue siendo vigente (Rememoro, por seguir en Japón, el último gran desastre y tsunami en Fukusima)

Se puede considerar a la Naturaleza una amenaza, el cambio climático está aquí, pero no considero beneficiosos los discursos alarmistas y apocalípticos. Aunque su apariencia esté cargada de estética seductora, me parece que conducen a la parálisis, a la desidia, al abandono, a un dejarse llevar porque ya nada sirve, a un sentirse inerme.

Tampoco estoy a favor de las actitudes violentas, de la lucha ante la amenaza, de ¡que gane el más fuerte!  no considero que la naturaleza sea algo que haya que abatir, ni por supuesto dominar. En la confrontación ambas partes pierden, ¡siempre!, la razón habita en el extremo opuesto de la felicidad.

La ola en sí, también representa el cambio, la transformación. El fuego destruye, el mar transforma. Las olas diluyen lo que no sirve y traen lo que está por venir. Creo que estamos en un momento de cambios y creo que los cambios son beneficiosos, los cambios son, todo es cambio, siempre hay cambio  y yo veo un cambio a mejor. La gran ola fagocitará estructuras y sistemas actuales pero traerá otros nuevos.

Los cambios son convulsos, pero no por ello negativos, me muestro optimista ante el futuro, ante lo que las olas también nos traen, de ahí las flores.

Boceto digital con flores

Sobre la intervención
Su&Si es bastante estrecho y, no he llegado a preguntar por qué, hay un trozo de pared sin textura en uno de los laterales en el que me costaba no ver pintada una de las estampas más conocidas de Japón.
Esta vez he pintado en interior y he echado de menos la interacción con los paseantes, pero he tenido la ventaja de pintar sobre una superficie lisa, y blanca. (esta vez no he tenido que dar ningún tipo de imprimación)

Recordaba la pared más pequeña así que cuando estuve delante para empezar me asusté de las dimensiones 2,5 x 4 m, y me sorprendí al comprobar que la ola se enmarcaba perfectamente en el espacio.

Manos a la obra, hice una pequeña retícula para encajar mejor el dibujo el primer día.
El siguiente lo dediqué a dibujar y comprar el material, de nuevo en el barrio, en Acevedo, pintura plástica, y por la tarde comencé a pintar.
Han sido muchas horas de trabajo con la presión por tener que terminar en una fecha, pero de nuevo ha sido un disfrute estar ahí, solo ahí, pintando.
 



Ha sido un poco complicado hacer fotos porque el pasillo es muy estrecho y frente al muro hay mesas. Están tomadas con el móvil y lo suyo hubiera sido utilizar un gran angular.

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Aunque no pinté en la calle, el cierre del restaurante estaba subido y pude ver cómo mucha gente se paraba a hacerse fotos en la puerta de flores, posaban divertidos y extrovertidos porque no sabían que estaba dentro. 
¡Que alegría escuchar sus risas!


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*Quiero dar también las gracias a Diana y Dani (y Mateo) por alojarme y cuidar de mí una vez más, y a Guillermo por estar ahí.

LA MALHABLADA. Proposiciones a las que da gusto decir que SÍ.

En otra entrada hablé del impacto en medios de la intervención que realicé para C.A.L.L.E. 2015 (Convocatoria de Arte Libre Lavapiés Emergente), pero el mejor impacto han sido las propuestas que han surgido después.
Esta es una de ellas, la más inesperada y la más gratificante, otra la he contado aquí y otra la puedes leer aquí.

La Malhablada es una casa/edificio dedicado al microteatro que abrió sus puertas hace justo un año.
Gloria, Paz y Sonia rehabilitaron el edificio y apostaron por ofrecer frescura a "La ciudad de saberes" y sobre todo, otra forma de entender la Cultura, más allá de las instituciones.

Ya es visita obligada si vas a Salamanca, está en pleno casco histórico (al lado de la casa de las Conchas) y de Miércoles a Domingo hay sesión continua de microteatro. La programación es mensual y por 3 euros puedes ver un pase exclusivo en alguna de las habitaciones de la casa.
Además se hacen exposiciones, hay otras actividades y talleres y… tiene una cafetería y una maravillosa terraza en la última planta con vistas espectaculares. Chapó!
Con los planes preparados para el verano y unos días reservados para pintar con calma, de nuevo en Su&Si, recibí un mensaje de Gloria, una de las Malhabladas, proponiéndome pintar la puerta de entrada al edificio porque les había encantado el trabajo que realicé en C.A.L.L.E. 
Las fechas para hacerlo eran el 9 y 10 de Junio, durante el festival FaCyL. Era un lástima pero en esas fechas no estaba disponible y hasta Septiembre no iba a estar de vuelta.
Revisamos calendario y, aunque precipitado, en dos días podía irme a Salamanca y pintar antes de partir a Madrid. Era un poco locura, pero eso fue lo que me hizo decir con más razón que SÍ, y que además podía dar la sorpresa a una gran amiga, y aparecer en su cumpleaños, y ver a muchos de los amigos de allí.

Esta vez no tuve tiempo de preparar boceto en dibujo, tuvo que ser directamente digital.
Cuando vi la puerta he de reconocer que pegué un brinco, ¡ya había dicho que sí! Además de preciosa (es la puerta original del edificio) era muy complicada para pintar. Está llena de entradas y salientes y  eso dificultaba el dibujo.
Las chicas me pidieron flores así que, en los primeros bocetos, empecé a colocar flores sobre la puerta pero los relieves me "obligaban" a ordenarlas y, ni me parecía que no representaba lo que había en el interior: frescura, sorpresa… y tampoco me convencía el resultado.
He estudiado y vivido muchos años en Salamanca, conozco muy bien la ciudad y cuando colocaba flores no sentía que fuera lo que allí quería ver. 
He nacido y vivido muchos años en Burgos y es una ciudad bastante verde, siempre en Salamanca he echado de menos ese color, esos espacios donde crezcan los árboles, donde emerja lo natural de forma espontánea.
  
Fotos tomadas en calles de Burgos

Así que una y otra vez me veía colocando elementos verdes en la puerta y dándome cuenta de que lo que echaba de menos en el casco histórico de la ciudad, y lo que veía en esa puerta era frescor, verdor, así que, tiré con el verde.
Presenté dos bocetos cuando llegué y a las chicas les encantó, así que, manos a la obra.

Uno de los montajes está hecho con una fotografía que tomé en el Botánico de Madrid, hojas en forma de corazón y, para que vieran un efecto más similar al acabado, tomé un dibujo que tenía y lo monté varias veces.
     
La intervención
La puerta estaba bastante deteriorada así que tocó espatulado, lijado y lavado antes de ponerme a dibujar. La verdad es que, aunque el trabajo pueda parecer duro, es muy grato "cuidar y mimar" aquello sobre lo que se va a pintar, es un bonito acercamiento, una excelente toma de contacto.
Pasé a dibujar todo lo que iba a ir pintado con un Molotow negro y a rellenar el dibujo con una imprimación todoterreno blanco. Me hubiese gustado comprar el material en Salamanca, en un comercio de la ciudad ya que iba a pinta allí y es para la ciudad, pero por falta de tiempo lo hice en Burgos, en Vallejo, todo un profesional Miguel Ángel.
Hubiese sido menos trabajo cubrir toda la superficie en lugar de sólo lo dibujado pero la idea y el efecto a conseguir era que ese verdor emergiera del interior, de La Malhablada, que atravesara la puerta y se mostrara al exterior.

Fueron dos días y medio pintando, con mucho frío y a ratos mucho sol pero, de nuevo ha sido una experiencia maravillosa pintar en la calle e interactuar con los comerciantes de al lado, con los turistas, con los autóctonos, con los curiosos, con los niños, con los ancianos...
Y de nuevo he podido comprobar que pintar naturaleza produce un efecto positivo inmediato en quién lo ve y muchos se alegran y te lo cuentan.
Me quedo con un niño pequeño emocionado que al ver el verde que se puso a aplaudir y con lo que me dijo un señor al verme pintar las hojas en forma de corazón: "es todo un acto de amor".

La verdad es que yo así lo sentía, pintar es estar en el presente, es estar presente, es darse y dejarse llevar a cada instante, amar es también eso.




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La proposición de La Malhablada ha sido un regalo y además en doble sentido. Las chicas celebraban su primer año y como autoregalo me encargaron pintar su puerta.
Para mi ha sido un regalo que me ofrecieran su puerta para pintar ¡que gran honor!  y dejar algo en Salamanca, una ciudad en la que hay tanto a lo que quiero.

FLORES PARA 'LA BUENA VIDA'

Da gusto tener amigos que confían en tu trabajo y te dan carta libre para decorar su negocio.
Es además un lujo que te remuneren económicamente.
Cuando María de La Buena Vida (si aún no conoces este bar de Burgos te invito a que te acerques a disfrutar de sus habituales, su buena música y sus cañas bien tiradas) vio la propuesta que había hecho para C.A.L.L.E.,y antes de ver cómo quedaba in situ, me ofreció pintarle su fachada y pagarme por ello.
Gracias María!!

Hice un pequeño boceto para que se hiciera una idea de cómo iba a ser el resultado.

En un principio sólo iba a cubrir una pequeña cenefa, pero ¡ya puestos! subí al pequeño desnivel y cubrí toda la parte derecha. Al final también la tubería.

Pintar sobre color oscuro supuso, de nuevo, tener que aplicar primero una cobertura en blanco para que la pared no absorbiera toda la pintura y apagara el color.
La elección de flores está en base a los colores del logotipo y del interior del bar: gama de naranjas, blanco y negro: Clivias, caléndulas, jazmines, gardenias, flor de arlequín, azucenas, dalias, amarilis...
Estas son algunas fotos del proceso.
Al ser oscuro el color de fondo tuve de dar una capa previa en pintura blanca a modo de imprimación.(Pintar dos veces)

Como La Noche Blanca iba a ser en unos días, el sábado 23 de Mayo, también preparé unas flores de cartulina que se regalarían esa noche.
Casi dediqué más tiempo a hacer estas flores que a pintar la fachada y entre medias tuve el altercado de que la pistola de silicona soltó una llamarada y dejó de funcionar (siempre es mejor invertir en mejor material y comprarlo en comercios de conocidos y que se dedican a ello que en los chinos)
Gracias también Sacris por estar pendiente en todo momento de lo que necesitaba.
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La Buena Vida abre de Lunes a Sábado. Calle San Juan, 39, Burgos

lunes, 1 de junio de 2015

C.A.L.L.E. en los medios

Recojo en esta entrada la repercusión mediática que ha tenido la intervención que realicé para calle C.A.L.L.E.
En prensa y blogs:

En La aventura del saber de la 2 aparecemos unos cuántos participantes hablando del festival, temáticas, técnicas….
Y doy las gracias: 

A Javier, el propietario de Su&Si, por su confianza y generosidad durante los días que he estado allí pintando y por decidir mantener más allá del festival la intervención.

A tod@s los que disteis vuestro voto a "Florecer/es Lavapiés" para acceder al premio del público ¡quedó la séptima! ¡Encantada con el resultado!
Los ganadores los podéis ver aquí

He vuelto a estar por allí después de terminado el evento y es una grata experiencia disfrutar viendo a la gente, parar en la fachada, sonreír y hacerse una foto entre las flores.